Para Kaitlyn, de 13 años, su mundo amenaza con derrumbarse cuando se entera de que sus padres quieren divorciarse, sobre todo porque amenaza con la pérdida de la casa que compartían en Portland, que siempre había sido el hogar de Kaitlyn. La adolescente tiene pensamientos oscuros y ha perdido el interés por la vida. Las palomas de cría que le regala el colega policía de su madre no mejoran las cosas. ¿Qué debe hacer con los pájaros? Entonces su mejor amigo Adam le da una idea: podrían robar la valiosísima paloma de carreras llamada Granger al criador local Jaan Vari, venderla y utilizar los beneficios para pagar la hipoteca de la casa de su familia.